01.09.2024
El sábado 31 de agosto, activistas de Ocean Rebellion y Extinction Rebellion dieron la bienvenida a la "Dama Resistente" de Cruceros Virgin en Ijmuiden con una ceremonia apropiada basada en el vago.
Desde hace unas semanas, los cruceros no pueden entrar en el puerto de Ámsterdam por activistas que bloquean las cerraduras de Ijmuiden.
La noticia se difundió rápidamente entre los cruceristas y los barcos empezaron a atracar en Ijmuiden en lugar de Ámsterdam, trasladando a los miles de pasajeros en autobuses al centro de la ciudad.
Creímos que los pasajeros del crucero merecían una bienvenida adecuada en Ijmuiden antes de desembarcar, una bienvenida a base de culos para que los cruceristas supieran la panda de gilipollas que son en realidad.
Descarados, los pasajeros de un crucero reciben un saludo de dos culos.
¿Qué tienen de malo los cruceros?
En Ámsterdam, los cruceros se están convirtiendo en una enorme molestia para los habitantes. No sólo tapan la luz (Ámsterdam es llana y la altura de los edificios está regulada), sino que los pasajeros, como este Estudio noruego espectáculos, no contribuyen mucho (o nada) a la economía local.
Lo único que los cruceros aportan a Ámsterdam es una enorme cantidad de contaminación. Estudios como éste de ONG T&E han demostrado que los cruceros emitieron 10 veces más óxido de azufre (SOX) en las costas europeas que 260 millones de automóviles en 2017.
Más investigaciones recientes da aún más miedo. Los cruceros son cada vez más grandes y el problema también. La industria de cruceros intenta maquillar de verde este problema cambiando poco a poco sus buques a un nuevo combustible, el gas natural licuado (GNL). Pero este combustible libera metano a la atmósfera, un gas de efecto invernadero 80 veces más potente que el CO2.
¿Por qué los habitantes de Ámsterdam deben estar constantemente expuestos a las emisiones de monóxido de carbono, dióxido de azufre y compuestos orgánicos volátiles (COV) de los cruceros? Los estudios han demostrado que estos contaminantes están asociados a una serie de efectos sobre la salud, como dolores de cabeza, tos, mareos y otras enfermedades respiratorias. También pueden irritar la piel, los ojos, la nariz y los pulmones. La exposición prolongada a estos contaminantes puede provocar enfermedades cardiacas, ciertos tipos de cáncer y daños en el aparato reproductor y los órganos internos.
No seas un vago de los cruceros, ayuda a Amsterdam a respirar, no reserves otro crucero, nunca.