RIVERCIDE ES IGUAL A SEACIDE ES IGUAL A ECOCIDE

Los activistas de South Devon Ocean Rebellion se centraron el sábado en la mala calidad del agua. De hecho, la calidad del agua es tan mala que nadarás en una sopa tóxica.

La acción sirvió para concienciar sobre la escandalosa cantidad de aguas residuales y "escorrentía agrícola" que fluye hacia Torbay desde los ríos locales. Descubra el espantoso estado de nuestros ríos viendo RIVERCIDE, un documental presentado por George Monbiot con música de Charlotte Church.

A ellos se unieron "Ocean Blues", "XR Samba Band" y "XR Song Carriers". Gary Joliffe, de "Till the coast is Clear", decoró el telón de fondo con la basura recogida recientemente, que se colocó en el muelle de Paignton junto con pancartas y banderas.

Colin Moore, portavoz de Ocean Rebellion, declaró:
"Con el aumento de las precipitaciones debido al calentamiento global, los sistemas de tratamiento del agua y otras medidas de protección se ven desbordados con facilidad. Los beneficios de las compañías de aguas no se han reinvertido lo suficiente en mejorar las infraestructuras, lo que ha provocado un grave deterioro de la calidad del agua".
"El documental "Rivercide" expone cómo el aumento de las precipitaciones da lugar a una combinación tóxica de "escorrentías" que se vierten por nuestros ríos. Se trata de una mezcla de contaminantes químicos procedentes de diversas fuentes, fertilizantes artificiales, escorrentías de desechos de vacas, pollos y cerdos y, lo que es peor, vertidos de aguas residuales humanas procedentes de los tanques de tormenta de las compañías de aguas. En los últimos días, un tribunal ha oído que Southern Water vertió enormes cantidades de aguas residuales durante años porque resultaba "más barato que tratarlas". Se les impuso una multa de 90 millones de libras. Todos estos efluentes están convirtiendo los ríos en cloacas desoxigenadas, matando a la fauna y disminuyendo la biodiversidad. Y lo que fluye por los ríos entra en nuestros mares".

Su compañero rebelde, Mike Puleston, añadió:
"South West Water es responsable de la pésima calidad del agua hoy aquí en el muelle de Paignton, tal y como afirma la aplicación SAS. En la última semana, las aguas residuales se han vertido cerca de las playas de Torbay y sus alrededores, según la Agencia de Medio Ambiente. Esto plantea riesgos potenciales para los nadadores y surfistas, según lo alertado por surfistas contra las aguas residuales.
Estudios académicos han demostrado que nadar en el mar aumenta considerablemente las probabilidades de contraer infecciones estomacales, dolores de oído y otras enfermedades. La Facultad de Medicina y el Centro de Ecología e Hidrología de la Universidad de Exeter realizaron un estudio que concluyó que, en comparación con los no nadadores en el mar, la probabilidad de desarrollar un dolor de oídos aumenta en 77% y la de padecer una enfermedad gastrointestinal en 29%".

Madre de hijos mayores, surfista y rebelde, Lu Overy dijo:
"Me encantan nuestros ríos y mares. Gran parte de la razón por la que vivo en South Devon es estar cerca del río Dart y de la costa. Me baño en el río y en el mar, y hago surf cuando puedo. Practico bodyboard desde que tenía 5 años y el surf es una de las cosas que más me gustan. Nadar en el río es muy diferente, una sensación de inmersión en el paisaje. Pero estas bellas experiencias están amenazadas... El agua contaminada me ha puesto enferma más de una vez. Ahora sé que debo tener cuidado con las tormentas y evitar el agua por miedo a enfermar a causa de las aguas residuales. Nuestro mundo natural está sometido a tanta presión... ¿qué podrán disfrutar y apreciar nuestros hijos y nietos? Hagamos lo que podamos para proteger lo que amamos. Digamos a nuestros diputados lo importante que es para nosotros. Nuestro gobierno debe invertir más en los organismos que pueden proteger nuestros preciosos ríos y mares en nuestro nombre. Asegurémonos de que saben que nos importa".

Le tocó a Tabatha, de seis años, mencionar el efecto de todos estos efluentes en la vida marina. Se unió a la acción tras seguir a los "Ocean Blues" por la ciudad. Cuando se le invitó a tomar el micrófono, no dudó en decírselo a la multitud congregada:
"Los mares no son para nosotros; son para los animales y nosotros no somos sus dueños, ¡son los animales!".

Ocean Rebellion exige que se ponga fin a la actitud de laissez faire del Reino Unido hacia el agua. Exigimos que los beneficios de los accionistas y las ganancias económicas a corto plazo sean cosa del pasado. El Reino Unido debe tener políticas que hagan de la salud del mar y de las generaciones futuras una prioridad. Si el mar muere, nosotros morimos.